martes, 20 de septiembre de 2011

De aquí para allá

De aquí para allá, de arriba hacia el centro y de nuevo hasta final,
las ruedas arrastran días de sol y de hierbas
desgastan los huesos de un río, allá arriba en las montañas.

De aquí para allá, nos detiene la difunta correa
nos saluda el mercado colorado,
un caballo anuncia el fin de las luces
un trágico desencuentro con el inconciente se desata,
emerge el tormentoso y sonámbulo crepúsculo,
parecido a la bruma y al deshielo
que al ingresar a las gradas se vuelve a congelar…

Por suerte al final nos esperan los lobos
que siempre están de buen humor y nos quieren de comer.

De aquí para allá y desde otra orilla suena la misma voz
que se convierte en canto, en aire de montaña y viento del Sur.